Se trata de la última canción que compone el ciclo Mädchenblumen, op.22, compuesto por Richard Strauss (1864-1949) y editado en 1888. Basado en un poema de Felix Dahn (1834-1912), nos da una muestra significativa de la importancia de la figura femenina como parte del repertorio romántico. El ciclo habla de cuatro tipos de flores: Kornblumen (Acianos), Mohnblumen (Amapolas), Epheu (Hiedra) y Wasserrose (Nenúfar o lirio de agua).
Ya estamos en el verano, comienza el calor que todos conocemos y evitamos estar expuestos a unos rayos de sol abrasadores. Qué mejor que una sombra fresca, rodeado de naturaleza, al son de una fuente, bajo un árbol verde y frondoso como puede ser el tilo: Der Lindenbaum. Al comenzar este popular poema de Wilhelm Müller nos encontramos con nuestro protagonista, una persona que nos relata cómo vivió y gozó en su día de este escenario tan pacífico y relajante; el tilo, lugar de encuentro de [...]
Hace poco leí el libro de Norman Lebrecht titulado “¿Por qué Mahler? Cómo un hombre y diez Sinfonías cambiaron el mundo”. El autor explica que la música de Gustav Mahler es recibida por muchos como una fuente de revelación espiritual. A su vez, en la página de internet “Mahler-list” podemos leer el testimonio de muchas personas contando a través de sus diferentes experiencias vitales cómo la música de Mahler ha sido significativa o terapéutica de una manera u otra en sus vidas.
Evocar en l’oient una sensació específica no és tasca senzilla: transmetre aquella cosa en concret, i no d’altra, s’haurà d'efectuar amb destresa. Verlaine va trobar una manera magnífica de fer-ho, en el seu poema En sourdine. A més, tenim la gran sort que Debussy va dotar el poema amb una nova dimensió, la dimensió musical, no fent res més que exaltar, amb una elegància, subtilesa i delicadesa pròpies del gran mestre, les paraules de Verlaine.
En 1884 Johannes Brahms, solterón de 51 años, escribe Wir wandelten, uno de los poemas de Polydora, de Georg Friedrich Daumer, quien a su vez se había inspirado en un texto magiar. Cuando en 1872 Brahms tuvo la oportunidad de conocer a Daumer, el escritor nunca había oído hablar del compositor ni de sus Lieder a pesar de que éste había puesto música a más de 60 de sus poemas, entre ellos los famosos Liebeslieder Walzer.